Que llueva, que llueva

Nunca pensé que algún día extrañaría la lluvia, porque me declaro ante ustedes amante del sol y el verano. Para mí lo mejor es levantarme y observar los rayos del astro rey entrando por mi ventana, salir, ver todo iluminado y lleno de vida.

Sin embargo, este año en particular la época seca se ha prolongado hasta el día de hoy y es que han habido algunas lluvias pero muy esporádicas. Realmente podemos decir que el cambio climático del que tanto nos hablan es hoy una realidad tangible y visible.

El problema radica en que muchas cosechas se han perdido y esto afectará el abastecimiento de alimentos en el país, además como todos podrán recordar el año pasado se dieron una serie de apagones por falta de agua en las represas hidroeléctricas, lo cual hace pensar que muy pronto volveremos a pasar por lo mismo.

El Instituto de Acueductos y Alcantarillados (AyA), ya nos alertó a todos para que racionemos el consumo de este valioso líquido si no queremos que nos falte más adelante, en fin que el daño que le hemos hecho a nuestro planeta ya nos está pasando la factura.

A raíz de todo esto me he dado cuenta que extraño la lluvia aunque suene raro. Me he puesto a pensar que sin ella no podríamos disfrutar de múltiples placeres, para ponerles algunos ejemplos: el olor a tierra mojada después de un aguacero, la lectura de un buen libro, escuchar mi música favorita, ver una buena película en una tarde lluviosa o tomar una siesta con el arrullo del agua al caer sobre el techo.

Son cosas que cuando estamos en verano no son iguales, pues las condiciones del tiempo hacen que nos pongamos nostálgicos, pensativos, filosóficos y podamos de esta forma deleitarnos mejor con estas simplezas.

Y es que pongámonos a pensar que haríamos por ejemplo sin una canción como "Riders of the Storm" de The Doors que con sus sonidos y ritmo nos transporta a esas tardes de invierno, no obstante en este momento me suena más "No Rain" de Blind Melon o talvez como cantaba Johnny Nash, "I can see clearly now, the rain is gone...".

En este momento en particular cantaría "I wish it would rain down" de Phil Collins o talvez lo que cantábamos cuando éramos niños:

"Que llueva, que llueva,

la Virgen de la Cueva,

los pajaritos cantan,

las nubes se levantan

¡Que si, que no,

que caiga un chaparrón!"

Si seguimos así nuestros nietos lo único que cantarán será "Have you ever seen the rain? de CCR, y es que todas estas canciones sólo pudieron ver la luz gracias a este fenómeno atmosférico.

Pero también en la literatura podemos encontrarla como en el cuento "El Temporal" de Carlos Salazar Herrera, donde "Pacho", el protagonista del relato, estaba cansado de la lluvia y "el temporal se le estaba metiendo en todas las ramificaciones de los nervios". En estos días Pacho estaría muy contento porque casi no ha llovido.

Por otro lado, este mismo autor también escribió acerca de la sequía que hoy nos aqueja "No llovía. Se cansaron los yigüirros de pedir agua. Cayeron las hojas de los árboles grandes. La tierra y el sol se bebieron el río." Aunque suene muy poética esta frase la realidad es que nuestros ríos se secan año con año y la situación parece no cambiar.

La lluvia ha ayudado a muchos a escribir, a componer, a amar, a pensar, en fin tantos sentimientos que nos evoca y que al mismo tiempo nos ayuda a todos los seres vivos a sobrevivir porque gracias a ella tenemos nuestros alimentos y el agua que consumimos. Esperemos que llueva pronto o quizás tengamos que esperar por una fría lluvia de noviembre como dice la balada rock "November Rain de Guns N´ Roses.